En la calle que da acceso a la plaza, las bolsas repartidas
por el suelo están listas para que comience la fiesta del ruido y humo. Es la
fiesta del Cristo de la Expiración. En la iglesia abarrotada, un hombre con
bigotillo, pelo blanco repeinado hacia atrás y cámara en mano nos da cuenta
del contexto, mientras los hombres cercanos sin mucho disimulo no dejan de mirar a una chica muy bien armada que atrae poderosamente la atención. Es la gran ocasión del pueblo, más grande que la fiesta patronal. La
gente asiste a la ceremonia del descendimiento del Cristo vestidos con los trajes de la
cofradía y los instrumentos musicales listos. En algún
momento los mineros de la zona, no muy dados a la fe, se aficionaron a este
Cristo con motivo de algún accidente minero acabado con bien. Ellos hicieron de
esta celebración, el viernes previo al domingo de ramos, algo muy grande, hasta autocares con gente de la tierra vienen de Barcelona. La
tradición se mantiene, a pesar de los altibajos de la minería. El hombre del bigotillo se
dice de una población de Ciudad Real, pero su mujer es de aquí y ningún año
falta. Mientras el cura hace sus ritos, el hombre nos alecciona sobre las
características del valle, los tres o cuatro pueblos que hay que visitar, siguiendo un orden riguroso, el más turístico, donde hay que comer la
sopa típica, el plato de la comarca a base de huevo frito, chorizo, morcilla,
jamón y patatas panaderas y vinillo de la costa, la fuente agria, el más alto. Así lo hacemos, seguimos
sus consejos. Cuando salimos valle arriba, ya suenan las
campanas, la música y la pólvora. Desde un mirador vemos la potente humareda, en este día soleado pero fresco. Cuando,
ya tarde, bajamos por la otra ladera del valle, vemos las chimeneas de humo en
distintos puntos de la ciudad. Nuestro informante nos ha asegurado que
comenzada la procesión ya no se para, que se llegan a quemar 500 kilos de
pólvora, que el paseo del Cristo en andas por el pueblo sigue más allá de las
cuatro de la madrugada.
sábado, 12 de marzo de 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario