Blogueando

Sigo pensando que lo más interesante de cuanto se escribe está en Internet. En los blogs especialmente. Queda, evidentemente, una industria editorial poderosa que se gasta enormes sumas en vender productos para la lectura, aunque poco tengan que ver con la literatura, ni siquiera con el escribir bien –caso Ruiz Zafón- y otra industria, o la misma, interesada en hacernos creer que lo interesante sucede en los periódicos. Pero hay que ser perezoso para no darse cuenta de que ya no es así.

Lo más extraordinario de Internet es que ya no hay censura, no se trata de la vieja censura política o religiosa, aquello que prestigió a los actuales periódicos durante el postrer franquismo y la transición. Es patético comprobar, por ejemplo, un día tras otro, cómo quieren hacernos creer que la Iglesia sea un enemigo a batir. No, la censura actual es más sutil, consiste en seleccionar los temas que ha de manejar la opinión pública y también el punto de vista sobre ellos. Internet permite a cualquiera considerar qué es lo realmente importante y el punto de vista desde el que enfocarlo.

• “Internet facilita la libertad de expresión. El mejor ejemplo lo tenemos en la proliferación de blogs, que conforman un territorio inmenso de discusión e intercambio de información constante. Pero todo esto tiene unos retos. Hay países que provocan enormes tensiones. Países, decía, que temen las posibilidades que la Red ofrece a sus habitantes para que se expresen libremente. Es más: internet es un antídoto imprescindible ya contra la censura. Y todo esto ha sucedido en los últimos 10 años. Es maravilloso". (Vinton G. Cerf, uno de los fundadores de Internet).

Antes que el periódico, yo miro cada día determinadas páginas que sé que no me van a defraudar, porque hablan de lo que me interesa y sus autores son honrados en la manera de exponerlo. Después miro los periódicos. Entre las páginas que me interesan están esta, esta y esta. Y también algunos blogs amigos como el de Joan, al que ahora seleccionan entre una centena de blogs en catalán para ser editado en papel. Dedica su página a cuestiones lexicológicas, siempre con un punto de originalidad y de humor. No sé si el que te publiquen en papel añade algo, supongo que es un tipo de recompensa, pero el interés reside en el chispazo de inteligencia que esperas encontrar cada día cuando pinchas en el enlace que te lleva hasta él.