lunes, 29 de octubre de 2007

Leidi Fall, senegalés, superviviente

Leidi Fall, senegalés rescatado por pescadores españoles el pasado miércoles al sur de Cabo Verde, tras 21 días a la deriva. Patrón y único superviviente del cayuco en el que murieron 56 inmigrantes que transportaba hacia España.

"El dueño de la piragua me eligió como patrón porque yo ya había hecho el viaje, a cambio de que condujera la piragua me pagó 200 euros y dos plazas para que las vendiera a quien quisiera".

"El cuarto día de viaje se acabó el primer bidón de gasolina. Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que nos habían engañado (Les dieron bidones de agua en lugar de gasolina). La gente empezó a gritar, otros rezaban y unos cuantos lloraron como si fueran niños pequeños. Yo creía que alguien nos rescataría porque el GPS indicaba que, en ese momento, sólo estábamos a 157 kilómetros de Canarias".

"La comida se estaba acabando, así que la gente comenzó a pelearse por ella. Algunos aprovecharon que otros dormían para tirarlos directamente por la borda sin que los demás hicieran nada por salvarlos".

"Cuando se acabó la comida la gente se volvió loca. Al menos 10, sobre todo malienses, se suicidaron tirándose ellos mismos al mar y los demás se fueron durmiendo poco a poco y ya no despertaron más. Cada vez que moría uno lo extendíamos sobre los bancos de la piragua y los que quedábamos rezábamos una pequeña plegaria antes de tirarlo por la borda".

"Yo ya no podía moverme. Estaba tan cansado que sólo rezaba para que Dios me enviara a alguien. Oí el ruido de un motor e intenté levantar la mano. Al poco tiempo el barco español se puso a mi lado".

José María Abreu, capitán del pesquero español:

"Una persona levantaba la mano, viva, entre siete cadáveres que flotaban a su lado. No se podía ni mover. El cayuco estaba lleno de agua. El hedor era insoportable".

Un familiar:

"Es mi sobrino, por tanto, yo me haré cargo de él, pero con todo lo que ha sufrido para intentar llegar a Canarias debería ser el Gobierno español el que se ocupara".

La madre:

"¿Qué pasa con los 200 euros que le pagaron por el viaje? ¿Es que se los quedaron los del barco español?".

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