Otoño en el cañon del Rudrón

El Rudrón es un río que discurre por la paramera de la Lora  hasta llegar al Ebro en la provincia de Burgos. Entre los pueblos de Hoyos del Tozo y Moradillo del Castillo el agua ha excavado en la caliza hasta formar un serpenteante cañón en cuyo interior ha ido apareciendo una flora y fauna muy interesantes que merece la pena observar, especialmente en el mundo cambiante del otoño.

Saliendo de Hoyos del Tozo, siguiendo el curso descendente del río, bajo unas impresionantes moles rocosas, se puede ir contemplando el vuelo de las rapaces -una muy importante colonia de buitres leonados y alimoches- o la caza de ratones por parte de águilas reales y perdiceras. A medida que la vegetación se adensa proliferan las aves, las mariposas, los pequeños roedores. Igualmente interesante es la flora, desde robles y quejigos hasta vegetación de ribera.

Moradillo es el final de la ruta antes de retornar a Hoyos. Merece la pena hacer una parada en este bonito pueblo para reponer fuerzas y contemplar la arquitectura popular. Situado en lo alto del cañón es un mirador natural sobre   la hondonada que se puede ver mientras de reponen fuerzas.
Entre ida y vuelta son 13 km y cinco horas de marcha. Acabada la excursión, uno puede acercarse hasta el pozo azul, a pocos kilómetros, en la localidad de Covanera, una surgencia kárstica con aguas de color intenso debido a la profundidad.