miércoles, 28 de febrero de 2024

En condiciones de vacío

 



Yo me he portado bien con la gente”


La política tiene una parte noble, allí donde toca el bien común. Es la parte de teoría y organización, la parte que no toca la urdimbre humana de quienes la sirven. En un espacio de vacío, la bola de plomo y la pluma caen hasta tocar el suelo con la misma velocidad. Sin embargo, la política la hacen los personajes de la trama, cuerpos que al rodar modifican el espacio que les envuelve. Pillos, fulleros, ganapanes y hasta catedráticos de economía. Para mí es un misterio que alguien, en la frontera de la adolescencia, con 15 o 16 años, decida hacerse político ingresando en unas juventudes, que luego participe del juego afilando su palabra y ganando voluntades para ir ascendiendo en la pirámide, de modo que el abstracto poder se convierta en pieza codiciada. En principio esa parecía la recompensa: mandar disponer prever. Que había bienes asociados debió ser un descubrimiento posterior. Me cuesta creer que alguien se hiciese político porque vio en ello la manera de enriquecerse a través de métodos que bordean la legalidad. Pero los hay, es evidente, las prebendas, la erótica del poder, la ampliación de los contactos, los negocios asociados y en última instancia, si hiciese falta, la corrupción: la compra de voluntades, las mordidas, el nepotismo, el retorcimiento de la ley.


Todo eso lo encontramos en la vida ordinaria, pero es evidente que los políticos están más expuestos. Ellos lo han querido así. Tienen una gran ventaja con respecto a cualquier otra profesión, salvo la del futbolista o famoso en los que es más difícil la corrupción, los fieles. Los fieles se congregan en iglesias bajo las directrices del pastor. Si dices las palabras adecuadas, y no importa tanto la promesa como el énfasis, una multitud te seguirá sin exigirte cuentas. Hagas lo que hagas te serán fieles, salvo en casos muy particulares en los que se produce una crisis de fe.


Lo que ocurre estos días es extraordinario. Se está escribiendo en el aire un guion que nos desvela la trama. Las cortinas levantadas y en el escenario los personajes mostrándose en cueros vivos. Ningún guionista profesional podía imaginar una historia como esta. Hay pillos que han actuado sin pensar en ocultar sus trapacerías. Hay poderosos tan sobrados de poder que no han tenido precaución alguna para ver qué ocurría a su alrededor. Hay profesionales de la política que ejercían en su negociado sin ocuparse de qué ocurría en el de al lado, quizá pensando que el país estaba tan entretenido en asuntos formales como disposiciones de ley, pactos y coaliciones, distribución de cargos, disputa de competencias y demás, y, si no era eso, en las personalidades psicóticas de quienes nos gobiernan, fuera de foco las trapacerías.


Lo disfrutable de esta obra que se representa en directo es que la palabra la promesa la organización y la villanía son como la bola de plomo y la pluma que, en condiciones de vacío, se desploman todos al mismo tiempo ante nuestros ojos. En la farándula española hay los funcionarios políticos, los que hacen indistinguible el negocio privado del bien público, los casos de psiquiatra, los incondicionales del jefe, los que hacen de la política un ideologema, los que utilizan su función para que prosperen los negocios del marido o para colocar a su pareja, faltan los políticos tout court o faltaban hasta que ha emergido de la marisma el personaje que se vasta a sí mismo. Bárcenas era un chiste comparado con Ábalos: no necesita que alguien le convierta en guion, en sí concentra a Shakespeare, Molière y Calderón.


Suele suceder que al final los asuntos más turbios salen a la superficie porque lo que en realidad le va a la gente es la novelería, la carnaza erótica y criminal, las traiciones, la autodestrucción. Nos importa más eso que nos engañen, que nos roben, que se lleven por delante un país sin gobierno, que no se ocupen como prometen de organizar un futuro mejor.


***


Musik. Always OnMy Mind (Clapton/ B. Walker)



Una niñera filipina en Barcelona

 

                                                                    I


" Por naturaleza , a las mujeres se les da mejor limpiar, debido a la suciedad inherente a la vagina". Sigmund Freud.


" El órgano sexual de la mujer es un sistema elegantemente autorregulado , mucho más limpio que, por ejemplo , nuestras bocas . Innumerables lactobactilos (como el yogur) trabajan día y noche para mantener las cosas en perfecto estado".


Si uno ve películas viejas o escarba en sus recuerdos ve a un negro limpiando zapatos o tocando música en un club de blancos o trabajando en un campo de algodón. Lejos de aquí, lo ve sucio, maloliente, subordinado. Los negros eran sucios como inherente era la suciedad a la vagina de la mujer, según Sigmund Freud. Al negro de ahora lo encontramos por doquier. Es una estrella de fútbol, del básquet o del cine, o a punto de naufragar en una patera o muerto a tiros a las puertas de Melilla, sin que ningún ministro de interior caiga por ello. También lo vemos aquí al lado ejerciendo cualquier actividad, vendiendo bolsos en el paseo marítimo mayormente. Ha alcanzado la condición de humano. Podríamos morrearnos con él o al menos compadecernos. No huele tan mal. Puede ser deseable como la prota de Noche polar. Es evidente que la percepción ha cambiado, no nos han convencido los discursos ni los libros (libros bien argumentados los hay defendiendo posiciones extremamente contradictorias), sino la evolución del ambiente, el cambio sutil en la atmósfera, la cercanía, la vecindad.


Lo mismo puede decirse con respecto a la mujer, aunque de otro modo: no la seducción sino el poder, no el poder que emana de la seducción, sino el poder del estatus, la preeminencia en condiciones de igualdad. La mujer ya no es lo que era. Unos hombres mandan sobre otros, unas mujeres mandan sobre otros. Se supone que los mejores en cada puesto, que han ascendido en condiciones de igualdad (es una generalización claro. Suponiendo que no hay corrupción nepotismo malversación). Freud ha sido descabalgado.


Incluso hoy mirando hacia atrás se me haría raro ver a mi padre fregando los platos y a mi madre con las manos en el arado. En cambio, mis hijos nunca me vieron con las manos en el arado (nunca he vivido en un pueblo), tampoco el fregar los platos como una tarea asignada. ¿Había sido mi padre instruido en las funciones de patriarca? No de forma directa. Para todos, entonces, las tareas se distribuían de forma natural, las tareas se asignaban en función de un hecho insoslayable, dar a luz. ¿Alguien ha reasignado las tareas? El ambiente. La evolución cultural, de forma acelerada, actúa de forma parecida a como lo hace la evolución biológica.


Qué mueve los cambios, qué hace que la atmósfera evolucione? No una única variable. La economía la tecnología la vida urbana los nuevos trabajos los mejores salarios el acceso a la educación los hábitos, la fricción personal, no la instrucción política o intelectual, sino el cambio social.


                                                                    II


Frankfurt tiene una gran industria contaminante. Le falta mano de obra pero le sobra dinero. A Mombasa por el contrario le falta dinero y le sobra mano de obra. Como propuso Lawrence Summers, por qué no llevar la fábrica contaminante de Frankfurt a Mombasa. La contaminación afecta al cáncer de próstata pero en Mombasa la esperanza de vida es baja y por tanto se darían pocos casos de cáncer de próstata. La inversión podría ser un multiplicador económico para Kenia.


Algo parecido sucede si sacamos el depósito de residuos nucleares de la comunidad de Madrid de Euskadi o de Cataluña para llevarlo a un pueblo de Castilla La Mancha: las tres comunidades son grandes consumidores de energía, pero con una alta población, en cambio en Castilla La Mancha sucede lo contrario; serían poco los afectados por la contaminación, de existir, y obtendría puestos de trabajo que tanto necesitan. ¿Sería una buena idea llevar la fábrica contaminante hasta Mombasa?


En Barcelona un ama de casa se pone a trabajar y contrata a una niñera filipina. Al ama de casa barcelonesa le bastaría con los ingresos que su marido trae a casa, sin embargo, otro salario multiplica sus oportunidades, el horizonte se amplía: se siente más libre, no depende de lo que el marido tenga a bien entregarle a fin de mes para sus gastos. Incluso puede pensar en separarse de él: después de tantos años hacer el amor con él es como practicar incesto, ha dicho alguien que no recuerdo. Aires nuevos. Para la niñera filipina que ha dejado a su marido y a sus hijos en su pueblo natal el dinero que recibe es poco para vivir en Barcelona pero como vive en casa de su empleadora no tiene gastos, sin embargo, para su familia es un capital importante.


"Las empleadas domésticas filipinas que trabajan en Hong Kong ganan tanto como un médico varón en la Filipinas rural. Las niñeras que emigran a Italia para trabajar tienen un salario entre siete y quince veces más alto de lo que podrían ganar en sus países de origen. ¿Son víctimas? Si es así, ¿en comparación con quién?"


El principal problema de Katrine Marçal (¿Quién le hacía la cena a Adam Smith?), a mi entender, es que cree que no puede existir un homo economicus abstracto, porque el hombre o la mujer común están llenos de cargas emocionales e irracionales, y sin embargo, al mismo tiempo, se queja de que el poder trate a la mujer como sujeto particular y no como el colectivo al que pertenece. Es la contradicción que chirría en el libro. Hace buen diagnóstico de la degradación moral del neoliberalismo (del economicismo en general), plantea buenas cuestiones, pero no asume contradicciones.



lunes, 26 de febrero de 2024

May December (Secretos de un escándalo)

 


De qué trata May December. Todd Haynes es uno de mis directores favoritos, capaz de combinar los musicales con los mejores melodramas: The Velvet underground, Carol, Mildred Pierce, I'm Not There, Lejos del cielo, Velvet Goldmine, ¿pero sabía qué quería contar en esta película? Tenía una buena historia, tenía dos magníficas actrices, Julianne Moore y Natalie Portman y tenía tema. La historia está libremente basada en un hecho real. Sucedió en Seattle. Mary Kay Letourneau, 34 años, profesora de una escuela de primaria, en la localidad de Burien, mantuvo una relación sentimental con un alumno de 12 años, Vili Fualaau. En la película elevan la edad a 36 y 13 años, respectivamente. Letourneau pasó 7 años en la cárcel: tuvieron dos hijos en el entretiempo. Se casaron después y ella inició el proceso de separación poco antes de su muerte, con 58 años. La película cambia los nombres, el escenario y otros detalles. El hilo que la mueve es la visita de la actriz que representará la historia en una película al hogar de esta familia para tomar nota de la personalidad de la mujer a quien ha de representar.


Hay muchos temas que toca pero no se centra en ninguno lo suficiente para hacerlo significativo. El principal de todos, la química cerebral o el proceso neurológico que está detrás de la pulsión romántica o sexual, ni aparece. Tampoco toca la derivada penal del hecho: ¿Se ha de penalizar un 'trastorno' químico? La película se centra en la complejidad de personalidades que no desarrolla: la mujer casada con cuatro hijos que pierde la cabeza por un preadolescente; el chico convertido en adulto que piensa su situación; la actriz que para absorber un personaje ha de transformarse en él. Añadamos a la sociedad que convive y reacciona ante 'el escándalo'.


La desorientación comienza con el título, May December (su versión en español, Secretos de un escándalo, es casi aún peor). A las actrices les pasa lo mismo que al director, no saben de qué va la cosa. Julianne Moore no escapa a la caricatura que le han asignado. La presencia de Natalie Portman, su magnetismo, debería bastar pero solo aparece en pequeñas ráfagas. Tan solo hay una escena que parece verdadera, la única que podría valer una película: en un escenario teatral, delante de chicos de secundaria, Portman se somete a preguntas sobre su condición de actriz. Un chico le pregunta cómo se maneja en las escenas de sexo. La respuesta de la actriz tendrá su réplica en una escena posterior. Una lástima porque había material, pero los guionistas y el director no han dado con la tecla.


Bastarden (La tierra prometida)



Seguro que la peli danesa, Bastarden, se lleva menos premios que May december, pero es mucho más entretenida. Si uno quiere pasárselo en grande, aventura, drama histórico y social, paisaje inhóspito y buenas interpretaciones (Mads Mikkelsen, el de Drunk/Otra ronda por encima de todos), porque los personajes están bien definidos, que vea esta película, disfrutará como un niño ante un cuento nuevo. Ambas compitieron en Cannes. Apuesto a que Bastarden permanecerá y de May December nadie se acordará dentro de un año. Ambas están en cartelera.


domingo, 25 de febrero de 2024

Señales




Putin ha olido la cobardía de una Europa sin líderes, distraída en guerras culturales en su interior. Las señales están ahí, pero hacemos lo posible por no verlas.


Sabemos casi todo lo ocurrido a Alexéi Navalni en una lejana prisión siberiana. Por un rincón de los informativos se cuela lo que le ocurrió a Maxim Kuzmínov: le descerrajaron varios tiros en Villajoyosa, Alicante, como antes habían matado a una familia rusa en Lloret de Mar. ¿Qué reacción ha habido por parte del Estado español ante un crimen cometido en su suelo?


Europa ofrece al mundo su modelo de vida. El mundo lo admira. Los inmigrantes africanos llegan por miles. ¿Lo defiende? Su mayor enemigo está a punto de dar el gran zarpazo sobre Ucrania y quizá más allá. Europa no se ha comprometido plenamente en su defensa, frente a un estado terrorista que no solo acecha en sus fronteras sino que mata impunemente en su interior sin encontrar una respuesta firme.


Navalni, la Rusia que no pudo ser


El Parlamento catalán acepta un nuevo proyecto de ley de desconexión, el paso previo para una nueva declaración de independencia. El gobierno, sin embargo, acepta los votos de los independentistas para mantenerse en el poder. El servicio secreto que ha matado a Kuzmínov estuvo detrás de las operaciones del golpe de estado de los independentistas catalanes.


Los republicanos tienen la oportunidad de elegir a una mujer competente, Nikki Haley, como candidato presidencial, sin embargo, elegirán a Trump. ¿Qué será de Europa entre Trump y Putin?


La respuesta a todas esas señales es la retórica enfática de nuestros líderes. Escogemos líderes íntegros y clarividentes para solventar el problema de la ceguera de la multitud. Ironía.


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Musik. Allways on my mind.



sábado, 24 de febrero de 2024

Dios y Estado

 

Hay un momento extraordinario en la madurez del hombre. Al mismo tiempo que se da cuenta de que la hipótesis de Dios es innecesaria, irrelevante incluso, de que puede vivir sin Dios, cae en que no puede vivir sin Estado. Muchos, la mayor parte de los hombres vivirán una vida entera sin darse cuenta de una y otra cosa. Solo con que unos pocos se den cuenta basta para la comprensión y el bien de todos, para que la sociedad siga funcionando. Tener Estado es mejor que no tenerlo. El Estado te puede esclavizar pero tiene reglas protocolos leyes que aunque injustas se pueden ignorar o soslayar, al menos intentarlo.


La idea de Dios fue útil durante mucho tiempo, una idea de ley y justicia, una mezcla de temor y esperanza. Pero cuando el hombre se hizo adulto comprendió que era innecesaria, pues el hombre podía afrontar su debilidad de otro modo.


El Estado ha evolucionado con la humanidad y de los Estados despóticos o totalitarios hemos pasado a los estados constitucionales, democráticos con todas sus imperfecciones.


viernes, 23 de febrero de 2024

Priscilla

 



"Si te llamo, necesito que estés ahí para mí", le dice Elvis a Princilla por teléfono.


Elvis está escuchando maquetas de nuevos temas.

- Cilla, ¿te gusta?

- No sé si me gusta. Le falta eso que nos hace pegajosas.

Él le lanza un objeto a la cabeza y luego le pide perdón.


Has perdido la cabeza. Tienes todo lo que una mujer desearía”.


Sofia Coppola tiene un don para crear imágenes que luego quiere que vea el espectador. Quizá lo haya heredado de su padre. Recuerdo sus películas - María Antonieta, Lost in Translation, Las vírgenes suicidas- por el colorido, el movimiento, la coreografía, más que por lo que sus personajes estén diciendo, pues el cine es, o debe ser, el arte de las imágenes en movimiento: lo que tenga que decir una película ha de ser dicho por el destilado que surge del conjunto de artes que participan en su producción, no por el guion escrito. Los grandes directores lo entienden. Un don en el que se asemeja a algunas de las películas de su padre: Cotton Club, Corazonada, El Padrino III, etc...


El problema con Sofía Coppola es cuando quiere transmitir una idea general, un saber, más allá del arte de hacer películas, es decir, cuando quiere ser socióloga o filósofa además de cineasta. En eso también se parece a su padre.


Lo que pretende con Priscilla es demasiado explícito, demasiado evidente, la mujer convertida en objeto a través de su romantización. Pocas parejas tan ‘ejemplares’ como la que formaron Elvis Presley y Priscilla Beaulieu para transmitir el canto del cisne de la pareja romántica. Presley moldeó a Priscilla siguiendo el patrón romántico que tenía poco más de un siglo de existencia. Como modelo se convirtieron, a su vez, en el ejemplo a seguir para un par de generaciones. Como en cualquier forma de vida idealizada, ellos mismos, Presley y Priscilla, sufrieron el efecto de dicha patología. Fueron infelices, se autodestruyeron. Coppola quiere redondear su obra haciendo que Priscilla abandone a Presley y se libere. Al final de la peli hay gente que se despide y una puerta cerrada que se abre. No deja de ser la promesa con la que el cine narra sus idealizaciones. Sabemos de las vidas de Elvis Presley, de Priscilla y de su hija Liza no fueron vidas que acabasen felizmente.


No siempre fue así, ha habido otras formas de relacionarse hombre y mujer en una unión con la promesa de durar: a través del rapto, el derecho de conquista, el acuerdo entre familias, el contrato matrimonial. De lo que la mujer se está liberando en la actualidad es de su romantización: de ser mujer objeto a través de la idealización. Elvis Presley conoce en una fiesta a la adolescente Priscilla Beaulieu, cuando está destinado en un cuartel en Alemania, convence a su padre militar y se la lleva a Menphis. La mete en un colegio católico, la transforma físicamenente, la encierra en Graceland en un ambiente de control absoluto, hasta convertirla en la imagen de mujer con la que sueña, una imagen de muñeca desexualizada. Priscilla enamorada se deja hacer. Liza, el producto de su tardío matrimonio, seguirá el mismo proceso. Sofía Coppola diseña una ultima secuencia en la que la mujer se libera. Cilla, en medio de una fiesta se despide de la corte que Elvis ha creado a su alrededor, monta en su coche, abre la puerta cerrada y escapa.


Prueba de que esta peli no es un biopic al uso, es decir, una historia sobre la vida de la pareja Elvis/Priscilla es que Sofía no se interesa por la faceta musical de Elvis, ni siquiera hay una canción interpretada por él en la banda sonora. La peli, como digo, presenta un caso ejemplar de romantización. Una romantización, por cierto, que Betty Fridan ya había desmontado en 1963 con La mística de la feminidad.



jueves, 22 de febrero de 2024

Lo que es del aire

 


Cuántas flores se mustian en el bosque o en la colina mueren sin llegar a saber que son muy bellas. Emily Dickinson.

Cojo cuatro libros casi al azar. Empiezo por este para descartarlo primero. Pero no lo hago, enseguida me atrapa. Si la poesía es buena -no se puede proceder por descarte- tanto mejor cuando abandona la importancia y no aparenta nada, la buena solo se ocupa de lo pequeño, todo lo que suma su grado de belleza. 'Quién quiere poseer lo que es del aire'.

Mascarell ha comprendido que la poesía va de lo pequeño, de lo fugaz, de lo que apenas se retiene un estante.






jueves, 15 de febrero de 2024

20. Semblanzas chilenas

 


Un viaje como este necesitaría al menos el doble de tiempo del que le hemos dedicado, para saborearlo, para detenerse en el paisaje, para descansar después de cada larga jornada y acabar de entender las historias que nos han contado. Siempre encuentras personajes singulares en el mundo de cuya experiencia puedes sacar alguna lección. Me duele haber dejado a Jose Ortega y Gasset con la palabra en la boca, sin darle la oportunidad de acabar la frase, sin tirar del anzuelo que me ofrecía, como nos ofrecía su historia aquel viejo Humberto, don Humberto debería decir atendiendo a los modos chilenos, que bajaba del monte para contarnos su peripecia, pero teníamos prisa, la prisa que nos mata.




Chile es un país joven y como tal lleno de oportunidades para gente atrevida. Empresarios como Enrique, aventureros como Cristian, ganapanes como Raúl, espíritus libres como Felipe. Hemos visto el Chile que Enrique ha diseñado para nosotros. Los países no son de una pieza sino que responden a narrativas contrapuestas. Enrique ha escogido unos barrios de Santiago y no otros, carreteras ciudades hoteles guías paisajes restaurantes menús, hasta los vehículos, los buses, vanes o ferrys que nos llevaban de un lado para otro. A sus 60 años, en proceso de divorcio, debajo de su pose taciturna - siempre con el teléfono en la mano - y de su charla comedida, Enrique tiene una larga y nutrida historia por detrás, una vida que se entrelaza con la movida historia del Chile reciente, que daría para un buen libro. Lástima no haber tenido tiempo ni ocasión para escucharla. Imagino su vida de empresario como un recurso, no como una vocación, para salir adelante, para ganarse la vida. Lo imagino joven aventurero antipinochetista recorriendo Chile, aún aletea en su pose melancólica el joven que amaba la música. Sobre ese conocimiento ha improvisado su empresa de viajes, más hábil en la gestión humana que en la de recursos, acostumbrado a resolver problemas, llamando a este o aquel conocidos suyos antes que a programar y asegurar. Mover a un grupo de turistas por la Patagonia deshabitada no debe ser fácil. Donde no hay hoteles hay cabañas, casas particulares ampliadas, pero su capacidad es limitada. De ahí surgieron parte de los problemas, el otro fue el autobús destartalado de Jorge que nos llevaba, un pequeño autobús a merced de los baches y las pistas de grava, sin capacidad para cargar con todo el equipaje, por lo que nos acompañaba una pickup. Juanjo, nuestro promotor, le apretó las tuercas para bajar el precio, en palabras de Enrique, y este se las apretaba a quienes estaban debajo. Ha tenido suerte con nosotros, somos pacientes, y nosotros con él por haber podido hacer un viaje tan extraordinario, rayando en la aventura.



El día que comenzaba la gran kilometrada apareció Raúl como conductor de emergencia por si Jorge se cansaba. Venía en un ferry, al que le había costado embocar por el vaivén del viento austral, con una rueda en la mano. No sé si llegaron a cambiar la rueda o si ya venía maltrecha porque un día reventó. Viajé con Raúl en la pickup por la interminable llanura de la Patagonia argentina. La paga de un jubilado chileno son las monedas en la boina de un pobre a las puertas de una iglesia. Raúl combina la pensión con extras de recadero en una panadería. De vez en cuando le llama Enrique para que le saque de un aprieto. Todos los chilenos que he conocido, salvo Enrique, tienen la lengua larga, así Raúl. Este hombre, de ascendencia navarra, ha tenido una vida trabajada, pero no le abruma la tristeza que corroe al jubilado europeo. El único problema de Raúl es que no sabe contarlo, como sí saben Felipe o Christian. No dejaba de hablar como si los sonidos que salían de su boca fuesen la música que la ruta necesitaba. Pero, qué decía. Ya no recuerdo, porque quizá lo que contaba no fuese tan necesario, sino el sonido de fondo que uno pone para transitar por un mundo sin alma.



A Felipe, hijo, lo está preparando Enrique para que se gane la vida en el negocio de los viajes, porque su afición a hacer y producir música no da para comer. Esa era su conversación, los gustos musicales. Pero resultó ser Cristian el personaje de la fábula. Viajé con él cuando la Patagonia chilena se estiraba en estepa. Cristian es de los hombres que antes que nada son palabras, de los que piden perdón por una nimiedad y dan las gracias por cualquier cosa, de los que te dicen con una sonrisa que nunca te van a engañar, de los que tienes que adivinar cuánto hay de cierto en lo que te están contando, cuál de todas sus vidas es la verdadera. Cristian hizo su carta de presentación en China. Viajó con una misión, vender los caldos de su todavía no suegro, un viaje de tres meses en el que debía convencer a un comerciante chino que no se fiaba de las transacciones en línea y que quería ver en persona al vendedor. Según nos contaba - lo oíamos Juanjo y yo-, el comerciante no hacía más que poner pegas para rebajar el precio -resumo el largo relato oído a medias entre el polvo y ruido de la bacheada carretera austral. Cristian, enfadado, abandonó la ciudad del comerciante sin decir a dónde iba. Al cabo de un tiempo, gracias a unas pocas referencias, lo encontró el chino y aceptó el precio inicial. El negocio próspera. Cristian se casó con la hija del vinatero y tuvo un niño, ahora de 3 años. No sé si antes o después, Cristian hizo la carrera de periodismo, modalidad de comunicación, en Santiago, y más tarde, sorpresivamente, se doctoró en ética del derecho en la Complutense de Madrid, donde vivió dos años.



Sin embargo, por azares de la vida, se ha dedicado al turismo, guía para los pocos que le localizan por la referencias que otros hacen de él, sin anunciarse en redes. Ahí comenzaba la segunda parte de su vida aventurera por la difícil orografía chilena. De los relatos reseñables, el primero iba de un periodista que quería conocer el desierto de Atacama. Desierto abrasador y helado en la misma jornada. El problema surgió cuando tuvieron una avería mecánica. No recuerdo si no había cobertura o los móviles estaban sin batería. Pensó que allí morían, sin comunicación, sin idea de mecánica, en el caluroso día, en la extremada noche. Sin embargo, el periodista tenía un cacharro con GPS. Así fue como dieron con un mecánico que les fue instruyendo para salir del apuro.


La aventura más extraordinaria y más sombría, de las que contaba, es la que vivió siendo guía de dos chicas británicas. Otra vez en el desierto de Atacama. En una parada toparon con dos alemanes que iban por su cuenta. Las chicas hablaron con ellos, se enrollaron y desaparecieron de la vista de Cristian. Eran las 6 de la madrugada y las chicas no aparecían. Las buscó sin esperanza durante la noche, pues, según él, en el desierto no se oye ruido alguno. Tuvo suerte, dio con una; los alemanes no habían querido seducirlas, sino robarlas. Las zarandearon, se defendieron como pudieron. Al fin, no muy lejos, encontró a la otra. Es mi historia, conozco Atacama, nunca te voy a engañar.



miércoles, 14 de febrero de 2024

19. Puerto Montt



 A esta hora del atardecer, desde este lugar, la sala de espera del aeropuerto de Puerto Montt, veo el icono de la región de Los Lagos, el volcán Osorno, iluminado al oeste y avanzando las sombras en su cara sur. Su cima es un cono irregular blanco. A su derecha con mucha menos nieve el Calbuco. Esperamos al avión que nos lleve a Santiago para pasar nuestra última jornada antes de volver a España. Esta ha sido una jornada calurosa con incendios en un bosque de esta región y una ola de calor en los alrededores de la capital.




La gente que puede abandona Santiago, comenta el padre de una niña de 10 años que quería fotografiarse con españoles a los que ha identificado por el habla. La familia, el padre, la madre y la niña tiene ganas de pegar la hebra. Quieren saber pero también explicarse. Reconocen que muy pocos en Chile pueden hacer vacaciones y menos acercarse a estas localidades turísticas como Puertao Montt y Puerto Varas por sus precios prohibitivos. Han subido mucho después de la pandemia, dice. Se alojan en un pueblo ribereño del lago Llanquihue; han venido a pasar la jornada a Puerto Montt que, dicen, cada vez les gusta menos.




Dedicamos el día a recorrer el paseo marítimo antes de visitar con calma el mercado recomendado de Angelmó. Nos detenemos en los puestos de 'queso del campo', probamos y al final compramos. Las chicas se detienen en los puestecitos de piedras y colgantes, entre ellas, el lapislázuli, que según los vendedores es la piedra de Chile. A cada paso nos asaltan los maître de los restaurantes del final del mercado, que coexisten con los puestos de venta de pescado fresco recién capturado. Nos ofrecen de aperitivo pisco sour, ceviche y panecillos calientes. Sabiendo que somos españoles, los vendedores nos ofrecen probar erizo de mar con limón y picoloco, un molusco con una gran concha que esconde dentro exquisito manjar realmente delicioso. Por todos lados, incluido un hombre con trazas de pescador de película, que nos llama desde su puesto, nos recomiendan que comamos locomayo que sería el manjar propio de esta zona al que el hombre compara con la paella española y la pasta italiana como gastronomía propia. Al final escogemos un restaurante con vistas al brazo de mar desde donde salen las barcazas que lo recorren. Justo debajo de nuestra ventana juguetean dos lobos de mar. Solo Manuela escoge el locomayo y no queda satisfecha. Los demás, por indicación del camarero, escogemos salmón, que según él es insuperable. No lo era tanto.




Puerto Montt, donde hemos dormido tres noches, fue poblada por alemanes desde mediados del XIX. Es la ciudad comercial y pesquera del sur de Chile.


martes, 13 de febrero de 2024

18. Puerto Varas - El volcán Osorno

 


Iniciamos el día en Puerto Varas, que no está muy lejos de Puerto Montt. Actualmente es una ciudad turística y residencial, con un paseo en la orilla del lago Llanquihue, casas de madera de estilo alemán de buena factura. La ciudad se creó en las riberas del lago en 1864 cuando el gobierno ofertó hectáreas de terreno a los pioneros, alemanes por encima de cualquier otra procedencia. Apuntamos la cámara por encima del lago en dirección al volcán Osorno, al fondo, fotos de postal si no fuese por la turbia luz del día. Es verano y abundan los turistas. Cada vez me pregunto cuánta gente en este país puede disfrutar del ocio organizado. La vida está más cara que en España. Las muchas hectáreas que el gobierno daba a los pioneros se han convertido hoy en parcelas para la clase media ascendente que quiere tener una casa y un terreno junto al lago y frente al nevado volcán Osorno.




Mientras tomamos un café - 5 € un capuchino- en la plaza de armas nos sorprende una columna de humo negro que emerge de un edificio comercial. Está ardiendo. Pronto aparecen llamas altas y furiosas; adivinamos el combustible: madera vieja y productos comerciales. La plaza se llena de humo sucio y tóxico y de curiosos. Los bomberos - hemos visto el parque bastante cerca - tardan en llegar. Tardan en llegar. A lo largo de la tarde nos enteraremos que ha habido cuatro muertos en lo que llaman el 'mall chino'.




El programa del día es visitar el primer Parque Nacional de Chile, declarado como tal en 1926. En su interior están el volcán Osorno, cuya blanca silueta cónica se impone a cualquier otra cosa por aquí, los volcanes Calbuco, que entró en erupción en 2015, el Tronador y el Puntiagudo, que hace o no a su nombre. Chile tiene más de 5000 volcanes. El lago Llanquihue centra cualquier perspectiva. El Osorno está extinto pero saltó por los aires a mediados del siglo XIX.



El parque hace frontera con su correspondiente argentino; juntos conforman una reserva de la biosfera de bosque templado lluviosos. Pumas, zorros y el pudú, el ciervo más pequeño del mundo, pueblan el parque. También aves, entre ellas un par de carroñeros que indiferentes nos hacen compañía mientras subimos al Osorno. Ascendemos por sus faldas áridas y secas, regadas con las cenizas y piroplastos lanzados por la reciente erupción del Calbuco. Las vistas dobre el Tronador a la izquierda y la larga cordillera andina y sobre el lago Llanquihue son magníficas. 




Por la tarde visitamos el lago Esmeralda o de Todos los Santos, conectado con Argentina mediante otros dos lagos. En su interior se encuentra el río Petrohué, conocido por los saltos de agua del mismo nombre, donde el torrente del río se desliza sobre grandes piedras negras de origen volcánico. Una marea de chilenos visita los saltos, previo pago. La visita no resulta agradable por el torrido calor de la tarde y porque hace tiempo que no ha llovido y no se aprecia como debería la dinámica del agua.


lunes, 12 de febrero de 2024

17. de Puerto Natales a Chiloé

 


Tras 5 días sumergido en el circuito de la w de las Torres de Paine vuelvo a la relativa normalidad del viaje turístico. Necesito calma para reconstruir, para rememorar. Durante el viaje no escribí una sola línea -desconectado durante cinco días- absorbido por el paisaje, absorbido por los caminantes que se cruzaban con nosotros, absorbido por el gentío que se mueve en torno a las cervezas en el difícil descanso de los campamentos (ni en la cena había calma, erradicado el silencio por la insufrible música de fondo y las conversaciones exaltadas). Ya en las tiendas, el sueño se sometía a la prueba del violento viento.


Todo paisaje, todo paisaje humano tiene su alma. El rastro que los hombres van dejando. No se capta fácilmente. Hay que separarlo del ruido. Una gorra, una camiseta, unas bragas, un olor que un matojo ha retenido, los nombres mismos de las cimas heladas. Ahora mismo, mientras intento hacer calma en mi mente, el chófer que nos lleva pone una emisora chilena en altavoz, con la política chilena de fondo, el helicóptero caído del expresidente Piñeira en primer plano.




Vamos a Chiloé, van y transbordador mediante, la isla más grande de Chile, 180 por 50 kilómetros, con capital en Castro, de 35.000 habitantes; unos 45.000 la isla entera. Los españoles parece desdeñaron la ahora muy productiva zona de Río Montt y se instalaron en ella, quizá por parecida a las llanuras de la meseta castellana.




A medio camino los carabineros detienen la van por ir a 80 km/h en vez de a 60. Multa al canto y Claudio muy preocupado porque tendrá que venir a la isla de nuevo para pagarla. Antes cuando aún estaba sereno, Claudio - don Claudio, si seguimos la diferencia chilena- nos cuenta la mítica historia del tranco chilota. El tranco es una figura que merodea por las casas al anochecer y si tienen las puertas trancadas se acerca y deja en ellas una advertencia, un mollete de color amarillento muy maloiente. Si la puerta está abierta entra y rapta a la doncella para llevársela al bosque. Cuando la doncella vuelve a casa lo hace embarazada del tranco. Desconozco la moraleja de la historia. En las tiendas artesanas se ven figuras del tranco transformado en brujo.




Chiloé es un paisaje verde que combina el bosque con la llanura, suaves colinas ondulados y alguna depresión con pastizal - la siega de heno ya empaquetada-; su principal atractivo son casitas de madera de dos pisos, también hay algunas de fea chapa, con un terreno alrededor de cultivo y pasto.



Las iglesias de Chiloé -16-, construidas con madera de olmo y lupa y revestidas con la vieja madera milenaria, hoy protegida, del milenario alerce, conjuntamente son patrimonio de la humanidad. Vemos primero la de Chacao y luego las de otros lugares, algunas realmente impresionantes por su sencillez y simetría. En su interior hay figuras que parecen sacadas de la imaginería barroca española. Uno tiene la impresión visitando la mayor parte de las ciudades chilenas que llega a un pueblo del Oeste, siempre en construcción: una larga calle con suelo de tierra prensada o barro y casas de madera en los lados. En un edificio de la municipalidad, un jovencito de 14 o 15 años me muestra recuerdos de su abuelo en exposición, cosas encontradas en su casa de poco más de un siglo de duración. Instrumentos de carpintería, una máquina para hacer mantequilla, una plancha antigua pequeña y oxidada, un extintor que no me sabe explicar cómo funcionaba, una prensa y dos tomos de un viejo periódico de la localidad.




En Castro, la capital, desde una barcaza acondicionada vemos las casa más antiguas, palafitos levantados con troncos de olmo y lupa. Las casas construidas con los árboles de la isla, lupa, mañío, alerce, ciprés y el coigüe. En Castro en una de esas casas palafito con vistas asistimos a la ceremonia del curanto, la comida propia del lugar: en un gran horno excavado en tierra se hace fuego y en una gran perola se cuecen, durante tres horas, carne de pollo, cerdo y ternera, y chorizo, junto con papas y una especie de pan en forma de gruesas obleas; por encima almejas y mejillones de gran tamaño. El resultado, muy decepcionante, sabor y textura pastosa, harinosa. Sobre las grandes bandejas en la mesa ha quedado al menos la mitad del cocido. Felipe, Christian, Raúl nos habían recomendado con énfasis que no dejásemos de probar tan exquisito manjar.


Los Españoles llegaron aquí en 1567; 300 años duró la colonización. Fue el último reducto de resistencia de la monarquía española, aquí tuvo lugar la última batalla de la independencia de Chile. 


En Dalcahue un puerto pesquero tomamos un delicioso café, el mejor del viaje, ,y vemos la última Iglesia.


16. Torres del Paine (el catamarán averiado) V

 



Cuando abro los ojos, el sol tiñe de tonos anaranjados dos enormes alas de mariposa. Estoy tendido sobre un saco azul mirando a través del ventanal de la sala de Wi-Fi. Nos hemos acomodado en distintas salas para solventar la noche. El último día de nuestra aventura en las Torres del Paine el catamarán que debía recogernos para llevarnos al bus y este a Puerto Natales nos ha dejado tirados, sin alojamiento, sin comida, cansados y malhumorados.



Mientras esperábamos la llegada del catamarán, Nahualt un chileno de la rabia - en todos los países los hay, rojos y azules que se contrarrestan-, despotrica contra quienes le hacen la vida imposible a Boric. Con una labia propia de estas tierras, nos relata el llamado 'estallido social' entre octubre de 2019 y marzo de 2020, calles incendiadas, coches destrozados, saqueos, quema de vagones de metro y decenas de muertos. Piñera decretó el toque de emergencia; el país se sumergió en un proceso de cambio hacia ningún sitio, pues sucesivamente se redactaron dos constituciones de signo político opuesto y las dos rechazadas en referéndum. Nahualt es un retórico de los que no admiten réplica. Y su argumento principal es que a Boric no le han dejado, los muertos los ocasionó la extrema derecha, unas pocas familias controlan los medios y su poder impide la política correcta y necesaria de Boric. Nahualt es la contrafigura exacta del guia que tuvimos en Santiago, para quien las intenciones de Pinochet eran buenas, tras un periodo de caos en el que incluso Allende se valía de cuerpos militares o paramilitares cubanos.



La retahíla de Nahualt la interrumpen un guardia y la directora del campamento. Nos comunican la avería del catamarán, sin embargo, no aseguran que llegue un sustituto. El tiempo pasa entre la calma, la desorientación y la irritación. Tenemos dos guías muy jóvenes, no sobrepasan los 20 años. Mientras al grupo de norteamericanos le dan salas y posteriormente sacos de dormir, nosotros seguimos a la espera. Al final nos ofrecen un rincón imposible, lleno de butacas y mesas, en el que no podemos instalarnos, simplemente no cabemos.



Como cortesía, la directora nos ofrece un plato de lentejas que se autocalienta para pasar la noche. Hay una pelea sorda por encontrar un buen sitio para dormir. Consigo encontrar un rincón sobre una tarima en la sala de Wi-Fi, la sala más despejada y menos incómoda. Consecuencias de esa noche, o quizá del agua fría de los arroyos que bebíamos, hemos vuelto con fuertes constipados y hasta con neumonía.

Por supuesto, después de ver el sol salir al otro lado del lago, si quiero un desayuno me lo tengo que pagar al coste alto que valen aquí en las cosas.




A las nueve de la mañana llegó el catamarán reparado. Aunque cansados, desde su plataforma nos despedimos del espectáculo de las Torres del Paine. Vine a este viaje sin ninguna preparación. Últimamente lo suelo hacer, dejarme llevar. Si el mundo me reserva alguna sorpresa que llegue sin avisar. El Fitz Roy, el Perito Moreno, Las Torres del Paine eran para mí nombres sin apenas un concepto detrás o una imagen que la situaran en el mapa de mi mente. El primero y el segundo eran excursiones de ida y vuelta. El Fitz Roy un pico junto a un glaciar dentro de una cadena de glaciares. Un paisaje hermoso, pero no único porque después hemos visto otros incluso más interesantes. El Perito Moreno me lo imaginaba como un paredón del que se desprendían bloques de hielo, el barco te acercaba a través de un fiordo y aparecía una enorme pared en la que la naturaleza se rompía con estrépito. No es así, no una masa vertical, sino longitudinal con un frente no demasiado elevado y del que el hielo se desprende lentamente a veces sin darte cuenta.



Las Torres del Paine que ahora vemos alejarse son otra cosa. Forman parte de un macizo montañoso, del que emergen picos o masas graníticas en forma de torres de un color cambiante, según la incidencia de la luz, a las que se sobreponen picos de material metamórfico oscuro. La imagen más impresionante del parque, la más fotografiada, la más publicitada que atrae a los turistas es la de las tres enormes torres, la del Norte, la del Sur y la del Centro, casi lisas y verticales, erectas sobre un lago turquesa, pero hay más, lo que vemos ahora desde el lago Pehoé, los Cuernos Norte y Principal, el Almirante Nieto, la Fortaleza.



Si algún tipo de compensación debería ofrecérsenos, esta llegó con el vuelo desde Puerto Natales a Puerto Montt, un vuelo de casi 2 horas donde, a pesar de la turbina del motor que tenía al otro lado de la ventanilla, pude apreciar desde arriba la orografía patagónica. las Torres del Paine y otras muchas Torres que se le parecen, el Campo de hielo Sur y luego el Campo de hielo Norte, las cimas, los inmensos glaciares, lisos y quebrados, descendiendo sobre los valles, la mancha blanca sin fin y en sus márgenes, lagos azules o esmeraldas, un país diseñado por los titanes del hielo.