A Very British Scandal

 

Siempre espera uno algo más que mero entretenimiento cuando se pone a ver una serie. En Un escándalo muy británico (HBO) lo hay durante los 3 capítulos que dura. La serie podría adscribirse al subgénero de aristócratas infelices. Una bella y chispeante rica heredera quiere lucir título de duquesa, a mediados del siglo pasado, en las Islas Británicas. Para ello se busca un duque con castillo en Escocia. El duque además del castillo está casado y también arruinado. El duque aportará al matrimonio el castillo, aunque aún lo tiene que heredar, y el título. La bella, el dinero de papá para restaurar el castillo y financiar una expedición al fondo del mar para rescatar un tesoro que saque al duque de sus problemas económicos. Ambos tienen hijos previos. El duque se divorcia de su segunda esposa, restaura, se casa con la bella y fracasa en el rescate. Empiezan los problemas. El duque es un mujeriego, la bella colecciona hombres. Ambos con caracteres complejos: amor, odio, resentimiento, infidelidades, infelicidades. Visto así parece un melodrama de tantos. Muchos lo disfrutarán como tal, aunque los tres capítulos les sabrán a poco.

Pero como digo, uno siempre espera algo más. La historia narra un suceso real que en Gran Bretaña pudo seguirse con el interés que en España se siguió el asesinato de los marqueses de Urquijo. La personalidad del duque está más o menos bien perfilada, sin embargo la de la bella se muestra deliberadamente turbia, es decir, confusa. Se apuntan rasgos de su carácter, de sus motivaciones, pero no se aclaran los hechos decisivos. Un juez dicta sentencia de divorcio en contra de la bella, pero en la última secuencia se desacredita al juez como un machista propio de aquella época. Para hacerse una idea correcta de lo que realmente sucedió habría que buscar información en otras fuentes, pero estamos hablando de entretenimiento no de un enjundioso estudio histórico o biográfico. Tanto cabo suelto tiene que ver con las controversias de la época: el ideal de mujer de entonces y el de ahora. ¿Cómo convertir a una mujer de una clase social superior, movida por intereses muy particulares, en modelo de mujer aprovechable para los actuales debates? La serie está hecha por mujeres, la dirección y el guion. Tras los tres capítulos quedo razonablemente insatisfecho.