Curiosa y sorprendente historia esta que nos cuenta en primera persona, como actriz e inspiradora, Ruth Wilson, en una miniserie de tres episodios (Filmin), del año 2018. El mismo día que el marido de su abuela, Alison Wilson, falleció apareció en escena otra mujer que aseguraba ser su verdadera esposa. Esa mujer tenía un hijo y Alison dos. Ninguna de las dos aceptó la sorprendente realidad que aparecía de golpe ante sus ojos. Alison hizo todo lo posible por demostrar que ella era la auténtica esposa de Alec y que de la otra se había divorciado. Incluso falsificó un registro intentando cuadrar la realidad. Pero las sorpresas no acababan ahí. Su marido no era el espía del servicio de inteligencia británico que decía ser y estaba en cuestión que hubiese salvado miles de vidas durante la guerra. Y si había pasado una temporada en la cárcel no fue por necesidades del servicio sino por algo más vulgar, era un ladrón. Sólo son tres capítulos pero lleno de sorpresas, aunque la realización no es tan buena, desde mi punto de vista, como a la que nos tienen acostumbrados las series británicas. Porque hay más, había otra mujer y otro hijo y ya al final, cuando la serie se está despidiendo, otra más y otro hijo más. ¿Cómo es posible que durante tanto tiempo ese hombre pudiese mantener la mentira ante los suyos y estos no desconfiar? Alison intenta un imposible, conocer la verdad, dar sentido a su vida con Alec y mantener a sus hijos al margen.
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