Martin Amis y el siglo bárbaro

 

Aunque ha muerto hace unos meses, Martin Amis es un escritor del siglo XX, es más, diría yo, es el escritor del siglo XX, su conciencia. En muchos aspectos el siglo XX es el mejor de los siglos, en otros es el peor. Las ciencias de la naturaleza nunca han sido tan esclarecidas, la tecnología tan desarrollada, la artes llevadas a la cima, la riqueza multiplicada y distribuida en sanidad y educación, ocio y estado del bienestar. Pero mientras unos hombres orientaban su trabajo hacia el bien otros se entregaron a la mayor de las barbaries. Hemos asumido como natural la mejor época de paz y prosperidad que la humanidad ha conocido hasta el punto de que nos sublevamos iracundos cuando, por alguna crisis, disminuye la riqueza o se tambalean algunos de los derechos adquiridos. No sucede lo mismo con la barbarie. Simplemente la hemos olvidado; no está grabado el sufrimiento en nuestra conciencia, como si esa no fuese una experiencia colectiva que retener. Martin Amis convirtió esa anomalía en objeto de su escritura. Qué sucedió durante los años oscuros del siglo XX. Cómo se llegó a la barbarie nazi y a la barbarie comunista. La moralidad pública desapareció de un día para otro e hizo de los hombres máquinas de torturar, esclavizar y matar. Hombres como nosotros: que hubiésemos hecho en su lugar, qué haríamos en un contexto parecido. Los personajes que Amis concibe en esas obras no son supervivientes como Primo Levis o Jean Améry, tampoco hombres eliminados sino verdugos, aquellos que dieron el paso para internarse en las tinieblas como podría darlo el lector si alguna vez es requerido.

No hay libro de Amis en el que no esté presente esa anomalía, ya sea autobiográfico o de ficción, ambos géneros a menudo mezclados. Sin embargo dedicó expresamente cuatro libros al asunto: dos al nazismo y otros dos al comunismo estalinista. La flecha del tiempo o la naturaleza de la ofensa (1991) y La zona de interés (2015); Koba el temible: La risa y los Veinte Millones (2002,) y La casa de los encuentros (2006), respectivamente. Toda persona preocupada por esa anomalía debería leer estos libros.