Peliculillas francesas

 

Francia nos envía dos peliculillas a estrenar en este periodo interpandémico. El cine francés, como el español, como el italiano, como el alemán, está de capa caída. Por una película buena, si hay suerte, al año hay tropecientas despreciables. De estas dos francesas que comento la primera, Une fille facile, a los cinco minutos, si no antes, se hace aburridísima. El tema del despertar a la vida del adolescente siempre ha sido un tema socorrido al que han acudido novelistas y cineastas. Hay muy buenos ejemplos a los que volver. Esta película, bajo un supuesto cuestionamiento de la moral convencional, no aporta nada, hasta los actores y el engarce de las escenas incumplen lo que de ellos cabría esperar .

La segunda, L'amour flou, pone comicidad a una separación matrimonial con hijos. Pero para mi gusto no hay elementos dramáticos, tampoco cómicos, que sustenten una historia. Una pareja decide separarse sin abandonar a los hijos. La solución que encuentran es un apartamento con zonas comunes para los niños y zonas separadas, privadas, para cada uno de la pareja. No creo que sea cosa extraordinaria, yo mismo he vivido algo parecido. Por cierto dirección, guion, actores, adultos y niños, y todo lo demás corre a cargo de una familia real. Realidad y ficción se confunden, lo que produce la desagradable, para mí, sensación de meter la nariz donde no debes aunque te llamen, ante tal muestra de exhibicionismo ajeno. Mientras la veo, me pregunto, qué hay de atractivo en esta película, toda película debe tener alguna cosa que te llame la atención, la belleza de los actores, el sexapil, alguna rareza o malignidad, un elemento disruptivo que te incomode, algo original llamativo. No he encontrado nada de eso y nada de humorístico, que precisamente es sobre lo que pivota la película. No sé si a los franceses les hará gracia, a mí ninguna, supongo que algo parecido a lo que les sucede a los españoles con la película de Segura, Padre no hay más que uno 2. La gente va a ver este tipo de películas. Vale. Lo único salvable de la peli son las canciones algo melifluas y dulzarronas pero agradables.