Qué puede
haber tan importante que impida el acuerdo entre fuerzas políticas diferentes.
La coalición nacionalista Junts pel sí (62 escaños) necesita seis votos
más para obtener mayoría en el Parlament y ponerse a gobernar. Se ha empeñado
en recibirlos de las CUP (10), el grupo antisistema, anticapitalista pero no
antinacionalista. Estas le han dicho que no. Pero los podría obtener negociando
con alguno de los otros partidos: C’s (25 escaños), PSC (16), PP (11) o Catalunya
sí que es pot (11). Uno solo de esos partidos le bastaría para gobernar. No
los quieren. No han hecho ni el más mínimo gesto hacia ellos. Si sumamos a esos
cuatro grupos representan a más de la mitad de la población, el 52 % de los
votos emitidos. ¿Es sensato, lógico, racional que una parte de Cataluña (47 %) prescinda sin más de la otra parte, que además
no es minoritaria? ¿Qué especie de locura es esta? ¿Qué tipo de milagro esperan
que ocurra convocando nuevas elecciones? ¿Qué piensan hacer con los que no les
voten? ¿Es moralmente tolerable dejar fuera de la gobernación a la mitad de la
población? Ya no digamos de un nuevo país, ¿qué harían? ¿Qué pasaría con ese 52
% si Cataluña fuese independiente?
martes, 5 de enero de 2016
Construir un país sin el 52 % de sus ciudadanos
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