Hablar sin miedo

   

              Si alguna vez los nacionalistas catalanes consiguen la independencia no será por su fuerza mayoritaria, que no lo es, sino por la dimisión de quienes están a favor de la unión, o dicen estarlo, de personas timoratas y acobardadizas, que no exponen con claridad sus opiniones y deseos, sino que hablan a media voz o dicen una cosa en público y otra en privado, sobre todo si hablan delante de nacionalistas, tanto personas que viven en Cataluña como gente que vive fuera, que temen expresar sus convicciones por temor a molestar a los independentistas, a herir sus sentimientos sin mostrar con claridad los suyos propios, como si estos no tuvieran el valor de aquellos, a que se les tome por miembros de la caverna, a que les llamen españolistas o fachas, por eso se ponen a resguardo, que con ellos no va la cosa, diciendo que están en medio, entre los radicales de uno y otro lado. Sólo hablando con claridad, sin miedo, exponiendo razones y sentimientos, podremos hablar en condiciones de igualdad y llegar a acuerdos.