sábado, 28 de enero de 2023

Kumbakonam - Pondicherry (Puducherry): Sri Aurovindo 20



Barrio colonial de Pondicherry o Puducherry. Edificios blancos alineados de dos plantas con terrazas. Calles anchas con aceras, discontinuas pero aceras. Nos descalzamos, dejamos el calzado en estantes numerados. Cruzamos la calle hasta la puerta de entrada al edificio, la que fue vivienda de Sri Aurobindo y 'la Madre', ahora casa museo que mantiene la comunidad o ashram. Nos piden que guardemos las cámaras en la mochila y que apaguemos los móviles. Vamos pasando sucesivos controles por miembros de la comunidad en un circuito guiado. Nos piden que guardemos silencio durante todo el trayecto. Entramos en la casa enfilados, siguiendo las indicaciones de una serie de individuos. Pasamos a un patio con árboles, en cuyo centro se levanta un pequeño túmulo cubierto de flores. Lo llaman el 'Samadhi' o santuario de mármol blanco que guarda los restos de Sri Aurobindo y 'la Madre' (el primero fue político indio y luego gurú, la segunda, de origen francés, fue su primera seguidora, recopiladora de su doctrina y organizadora). Hay gente que se arrodilla ante el túmulo, lo toca con la frente y las manos con unción y cierra los ojos. En los alrededores hay gente sentada, de rodillas, concentrados, con la mirada perdida, occidentales e indios. 

Hacemos un recorrido prefijado, dirigido, hasta llegar a una sala llena de fotografías de Sri Aurobindo y 'la Madre' en blanco y negro, en distintas etapas de sus vidas, sin que en ninguna de ellas asome un rasgo de espondaneidad, ausentada su condición humana, ajenos a la mortalidad. Ambos, sin embargo, están bien muertos y enterrados, a pesar del aura con que cada fotografía está concebida. La siguiente sala es una biblioteca con estantes cubriendo todas las paredes del techo al suelo, y en cada estante la colección de los libros que Sri Aurobindo y 'la Madre' escribieron o cuyo saber único fue recogido por sus discípulos o sadhakas, en diferentes idiomas, cada uno numerado para pedirlo en la mesa al final de la sala a cambio de un precio. De ese modo se visita el famoso ashram, se sale de la casa, se cruza la calle y se llega hasta el lugar donde se ha dejado el calzado donde volver a ser terrenal y mortal.

Desde que se fundó en 1926 la comunidad ha ido creciendo. Los sadhakas se han ido especializando en multitud de labores. En la actualidad, los ashramitas viven y trabajan en más de 400 edificios repartidos por toda la ciudad. Desde 1968 la comunidad se extiende a una ciudad nueva junto a Pondicherry, Auroville. Miles de curiosos o buscadores de espiritualidad acuden al ashram para la práctica del yoga integral, en busca de


"una apertura de la mente a una mayor amplitud y al sentido del Sí mismo y del Infinito, un surgimiento a lo que se ha llamado la conciencia cósmica, el dominio sobre los deseos. y pasiones; un ascetismo exterior no es esencial, pero la conquista del deseo y el apego y un control sobre el cuerpo y sus necesidades, codicias e instintos son indispensables".

 




Puducherry (o Pondicherry) fue una colonia francesa en la India hasta 1954, dentro del territorio del Estado de Tamil Nadu. Un aire francés se respira en el barrio colonial: calles bordeadas de árboles, villas coloniales de color mostaza, tiendas de moda, cuisine en los restaurantes, iglesias católicas y catedral y un paseo marítimo frente a la bahía de Bengala y poco más. Solo he oído el francés de los turistas que llegan de la ex metrópoli con nostalgia de la antigua 'grandeur'.





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