Sarajevo

 

Esta es la historia de cómo saliendo a pasear

Junto al río Miljacka en busca de tema me encontré a mí mismo

No era la ciudad apropiada

Con sus catorce niveles de gobierno

Y sus siete mil políticos

Tantos se necesitan para desenredar identidades y etnias

Me duele mi insensibilidad a las afectos

A quien espera de mí lo que no le puedo dar

Mas por qué he de ser el que no soy

He hecho de mi un hombre caminando

Siento que soy cuando sé que no soy reconocido

Soy feliz cuando estoy solo pero infeliz cuando no estoy en compañía

Una vez paseé con una mujer por estas calles

No era amor lo que hacía que juntos camináramos

Aquella mujer siguió su camino y yo el mío

Ahora otra mujer podría caminar conmigo 

Pero no quiero una mala perspectiva

Las puertas de la catedral católica están cerradas sus agujas apagadas

La ortodoxa se aguanta sobre andamios

No puedo adivinar qué dice el canto del muecín

Estoy triste por haber fallado a tantos

Me pierdo en las estrechas calles del barrio otomano

Pequeñas tiendas joyerías restaurantes con mesitas en la calle

Una mujer con niño se me acerca con la mano extendida

Que le puedo dar si ni siquiera tengo su moneda

Me acerco a una mezquita en la hora del rezo

Entro me acodo detrás de una reja

Las mujeres a la izquierda los hombres a la derecha inclinan la rodilla rezan

Cuando paso la línea del Imperio austrohúngaro dibujada en el suelo

La multitud cede ante una calle más amplia

Tiendas de lujo heladerías sofisticadas turistas

A fuerza de no hacer felices a los otros soy infeliz yo mismo

Cuando de uno se trata el tema se complica